Este año se presenta con algún nuevo proyecto, pero sobre todo con ganas de consolidar lo conseguido, cuidando si cabe más la calidad y fidelizando al alumnado. Hablamos con Alejandro Villacorta de la Escuela de Vela del Real Club Náutico de Valencia.

1. A día de hoy la Escuela de Vela del Real Club Náutico de Valencia tiene abiertos cursos todo el año y el usuario puede elegir entre modalidad colectiva e individual, ¿qué abanico de opciones tenéis en la escuela para quien quiere iniciarse en la vela?

En el Real Club Náutico de Valencia tratamos de fomentar la práctica deportiva de la vela en todas las edades, por eso tenemos diferentes productos que tratan de dar respuestas a las diferentes inquietudes. Principalmente trabajamos en aparejo fijo con los topaz y los tom28, y en aparejo libre con el windsurf de iniciación. Cuando alguien contacta con nosotros miramos de adaptarnos a su horario y a sus expectativas; y una vez realizado el curso de iniciación le damos opciones para seguir navegando.   

2. Pero aunque estéis abiertos todo el año habrá meses con mejores condiciones y meses con peores condiciones para navegar. En la escuela del RCNV, ¿cuáles son los mejores meses o estaciones para disfrutar de un curso de vela?

Como bien dices la escuela está abierta todo el año y cada temporada tiene sus cosas. Nosotros trabajamos desde la base de regatas del RCNV, y la actividad en la base no para, cada fin de semana estamos más de 20 lanchas en el agua coordinando la actividad de más de 200 personas navegando, y eso, si no hay regata. En verano los fines de semana y agosto son más tranquilos, pero en julio entre semana seguimos trabajando con esas 20 lanchas.

En la escuela normalmente trabajamos con sesiones de tres horas, en invierno nos solemos quejar un poco más de la temperatura, pero si vas bien equipado no es problema pasar la sesión sin llegar a coger frío. Al final, lo que te hará disfrutar más o menos la sesión de navegación, será encontrar un buen día de mar y viento, y de esos los hay durante todo el año en nuestras aguas. 

3. Como has comentado  la escuela del RCNV  se caracteriza por su flota de Tom28 y ‘Topaz’ con los que cientos de ciudadanos se inician en el mundo de la navegación, ¿qué ofrecen o qué destacarías de estos barcos colectivos?

Cuando llega alguien nuevo a la escuela siempre le aconsejamos comenzar con el tom28, ya que lo trabajamos como un barco colectivo en el que siempre va el técnico a bordo. Se trata de un barco estable que soporta un rango de viento muy amplio, ideal para iniciarse a la vela descubriendo los diferentes roles a bordo de un barco de regatas y asentando los conocimientos. A la vez, es ágil, veloz y con maniobra de spinnaker; por lo que son muchos los alumnos que siguen navegándolo en las sesiones de perfeccionamiento.

El topaz, por su lado, se trata de un barco que permite al alumno avanzar en la navegación autónoma. El técnico acompaña siempre desde la neumática y lo trabajamos tanto de manera colectiva con menores, como de manera individual con adultos y menores ya más experimentados.

4. Si recuperáis cifras de la temporada pasada, ¿tenéis un recuento de cuantas personas pasaron por vuestra escuela?

Durante el 2022 pasaron más de 3000 alumnos por la escuela de vela del Real Club Náutico de Valencia.

5. Y si analizáis las personas que van a probar y luego se quedan practicando vela, bien en vuestra escuela o bien en otra, ¿es mucha la transmisión de alumnos que luego se van quedando vinculados a la vela?

En realidad, es este uno de nuestros principales objetivos, el conseguir mostrar la vela como un deporte para practicar con continuidad. Desde el primer momento que llega el alumno a la base de regatas les enseñamos que la vela es un deporte de largo recorrido, cada día en el mar la experiencia es diferente por lo que se aprende a base de horas, y por eso les mostramos las posibilidades que hay para seguir navegando ya sea en nuestra escuela o en otras de la red de escuelas. En los últimos años hemos podido ir viendo como va mejorando esa tasa de transmisión del alumnado a fuerza de ir ofreciendo nuevos productos de perfeccionamiento y de continuidad que encajan mejor con las necesidades de cada alumno.  

6. Además también tenéis experiencias por un día, ¿en qué consisten estas actividades?

Valencia está haciendo un gran esfuerzo para posicionarse como destino de turismo deportivo, en ese sentido las opciones de experiencia de un día nos sirven de reclamo para ese público que va en aumento. En ese tipo de actividades, aparte de las salidas a vela individuales o en familia, también englobamos a las organizadas expresamente para grupos más numerosos, ya sean colegios que desean pasar una mañana realizando actividades náuticas o empresas que desean cohesionar sus equipos con una jornada de team building. 

7. De cara a 2023, ¿sobre qué puntos estáis trabajando desde la escuela?, ¿os gustaría ampliar o mejorar algún aspecto?

En los últimos años hemos visto como de repente mucha gente que no se lo planteaba se giraba al mar con ganas de aprovecharlo, y hemos estado trabajando junto al resto de la red de escuelas para que nadie se quedase con las ganas de navegar. Este año se presenta con algún nuevo proyecto, pero sobre todo con ganas de consolidar lo conseguido, cuidando si cabe más la calidad y fidelizando al alumnado para que no se quede sólo en esa experiencia de un día.

8. Ahora muy pronto tenéis ‘Sailing Fallas’ y ‘Sailing Pascuas’ que son campus de vela pero multiactivdad, ¿cómo están organizados estos campus?

En el Real Club Náutico de Valencia trabajamos de la mano la escuela de vela y la escuela de remo, fruto de esta sinergia nacen los sailing camps, productos de multiactividad que coinciden siempre con los periodos de vacaciones escolares. El objetivo final del campus es que el alumnado disfrute practicando los deportes náuticos que trabajamos en la base, es decir: la vela, el remo, el paddle surf y el kayak. La organización de la sesión dependerá del alumnado y en función de las condiciones meteorológicas de cada día se trabajarán más uno u otro deporte. Por lo general durante el sailing fallas y el sailing pascua trabajamos solamente la vela y el remo, ya que el agua sigue fría y estos deportes se pueden realizar sin la necesidad de mojarse, así no resulta imprescindible acudir con neopreno y podemos llegar a más gente.

9. ¿Qué significa y qué os aporta como escuela ser parte de la Red de Escuelas Homologadas de la FVCV?

Formar parte de la red de escuelas nos aporta el prestigio de pertenecer a una marca reconocida que certifica unos estándares de calidad. Además, nos alegramos de poder formar parte así de manera asidua en un foro dónde trabajamos todas las escuelas de la mano para seguir fomentando y optimizando recursos y metodologías.